sábado, 17 de octubre de 2009

El Amor y La Locura


Habiendo la locura
Con el amor reñido,
Dejó ciego de un golpe
Al miserable niño.
Venganza pide al cielo
Venus, ¡mas con qué gritos!
Era madre y esposa,
Con esto queda dicho.
Queréllase a los dioses
Presentando a su hijo:
¿De qué sirven las flechas,
De qué el arco a Cupido,
Faltándole la vista
Para asestar sus tiros?
Quítensele las alas
Y aquel ardiente cirio,
Si su luz ser no pueden
Su vuelos dirigidos.
Atendiendo a que el ciego
Siguiese su ejercicio,
Y a que la delincuente
Tuviese su castigo,
Júpiter, presidente
De la asamblea, dijo:
“Ordeno a la locura
Desde este instante mismo
Que eternamente sea
De amor el lazarillo.”

Félix María Samaniego

2 comentarios:

  1. Acabo de despertarme... vaya que loco y a la vez romántico.

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  2. He tratado de ser racional desde que tengo uso de razón y sentir lo que siento me ha llevado a los límites de mi conciencia y aún ahí sigo sintiendo amor. Maldita locura, abre sus alas dentro del corazón y... creo que aún soy algo consciente.

    Han habido ocasiones en las que casi he enloquecido pero ella no siente lo mismo que yo y no podría lastimarle jamás.

    Locura + desesperación = mala combinación.

    Cuidate. Vaya temita el de esta vez, me siento algo aliviado.

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